Es un ecosistema comunitario virtual formado por todos aquellos consumidores y generadores que están dispuestos a contribuir con su flexibilidad energética a crear un mundo más sostenible, participando de forma activa en la transición energética.

La Comunidad Flex logra que los consumidores tengan un consumo más eficiente mediante:

• La reducción de pérdidas de energía. Nuestros dispositivos Stemy ayudan a que los recursos energéticos tengan menos pérdidas.
• El aprovechamiento de renovables al máximo. Esto significa que sincronizamos el consumo con la generación de energía renovable cercana a los consumidores.
• La reducción de picos de consumo. Logramos reducir los picos de consumo gestionando los recursos energéticos de manera más eficiente.

Mediante la reducción del consumo, logramos aumentar la eficiencia energética de los consumidores. Además, consumimos cuando la energía es más barata, ayudando también a reducir la factura.

El sistema eléctrico debe mantenerse en equilibrio, es decir, la generación debe ser siempre igual a la demanda para evitar daños y apagones en la red.

La necesidad de mantener el sistema eléctrico en equilibrio supone un reto con el aumento de la generación de energías renovables. Este tipo de generación no es flexible y es menos predecible (no se puede controlar cuando hace sol o sopla el viento), por lo que ahora el equilibrio también depende del consumo de energía.

En este contexto, la flexibilidad energética consiste en que los consumos se puedan adaptar a los cambios en la generación para mantener el sistema eléctrico estable.

Agregamos consumidores y creamos una gran planta de generación virtual que participa en los mercados eléctricos (igual que las plantas de generación tradicionales, pero sin usar combustibles – ahora el “combustible” son los consumidores). Cuando el sistema eléctrico necesita generación, la planta virtual deja de consumir (generar y dejar de consumir es lo mismo para mantener el equilibrio del sistema) y, cuando el sistema eléctrico necesita dejar de generar, la planta virtual comienza a consumir. De esta forma, democratizamos la gestión de la energía, que pasa de estar en manos de unas pocas centrales a estar en manos de todos los consumidores.